viernes, 21 de octubre de 2011

Incondicionalmente, te quiero.

Eres mi vida, lo más importante que tengo ahora mismo. No sé ni como empezar diciéndote todo lo que quiero decirte, todo lo que siento. Eres imprescindible, totalmente importante, esa pieza que hace que vea las cosas de otra manera, la que me enseña que detrás de todo siempre está esa parte positiva. Que al fin y al cabo detrás de cada maldito problema, siempre estará la más sencilla de las soluciones. Me has ayudado a convertirte en una persona coherente incluso en los casos más "extremos" que con 16 años he tenido que vivir. Puede que no siempre tengas una respuesta a mis dudas y que no siempre tengas una razón para darme por la que pueda sonreír, pero estás ahí, detrás de cada estúpido bache. 
No siempre todo es perfecto, pero no hace falta que lo sea ya que me gusta tal y como es. 

Me encanta, me encanta tener esos días tontos en los que poner la música y cantar es lo único que nos importa en el momento, me encanta que seas esa mujer independiente, fuerte y sobretodo valiente. Me encanta que tengas esa jodida sonrisa en la cara todos los días cada vez que me levanto, solo para desearme unos buenos días. Me encanta que cuando estoy exageradamente triste, me mires y me cantes esa parte de la canción que tanto nos gusta a las dos, "no voy a sentirme mal.." Me encanta que cada vez que comemos me cuentes lo que has hecho a lo largo del día y todas esas "rareses" que te pasan.

Puedo decir que me alegro, me alegro de tenerte a ti, a la persona más fuerte a mi lado. Eres un gran ejemplo a seguir, a pesar de los enfados y de alguna que otra llamada de atención por tu parte. Completamente importante y especial. 
Gracias por todo, por todos esos caprichos, consejos, sonrisas, miradas, ilusiones, juegos, sorpresas, emociones, apoyos, momentos.. 
Gracias por soportarme día a día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario